SIGNOS Y SÍNTOMAS DEL CONSUMO DE HEROÍNA

   

Si estas preocupado por un ser querido que parece que podría estar consumiendo heroína, el problema es que el consumidor de drogas rara vez es honesto acerca de las sustancias que el esta consumiendo. Puede llegar a ser una labor de detective el averiguar la droga que esta consumiendo su ser querido mediante rastrear los signos de consumo de heroína. Si usted esta tratando de ayudar a alguien de quien sospecha que esta consumiendo heroína, usted ha venido al lugar correcto para encontrar los signos y síntomas del consumo de heroína.


Restos del consumo de heroína que usted podría encontrar

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Normalmente la heroína se fuma, se inhala o se inyecta. Así que dependiendo de la forma de administración, se pueden encontrar restos de las drogas o de la parafernalia del consumo de drogas que se dejo atrás. La heroína en si puede ser una sustancia en polvo o una sustancia que es fácil de deshacer, que va en toda una gama desde casi blanco hasta el marrón oscuro. La heroína alquitrán negro es casi negra, y es pegajosa en vez de ser en polvo.

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Usted puede encontrar jeringas o pequeñas pipas de cristal o de metal. Una persona que disuelve la droga y se la inyecta también puede dejar cucharas sucias y encendedores por ahí. Una persona que se inyecta también necesita algún dispositivo para hacer que las venas se agranden, por lo que puede ser que se encuentren cinturones o tubos de goma en la zona donde el esta usando la heroína.

Síntomas rápidos de consumo de heroína

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La heroína es un opiáceo de acción rápida. Cuando se inyecta, hay una oleada de euforia que llega en cuestión de segundos. Aquellos que consumen la droga de otras formas pueden no sentir esta oleada tan bruscamente.


El consumidor tendrá la boca seca y su piel se vera sonrojada. Las pupilas del consumidor estarán constreñidas. El se sentirá pesado y aturdido y su estado de alerta puede aparecer y desaparecer. Los consumidores de heroína pueden cabecear de repente. La respiración será más lenta, que es como mata una sobredosis.

 

Cuando esta despierto, el pensamiento de la persona no será claro. Ellos tienden a perder parte de su memoria. Su toma de decisiones y el autocontrol son propensos a deteriorarse.

 

Algunos de los signos de consumo de heroína menos ¨agradables¨ son la picazón, nauseas y vómitos que pueden acompañar al consumo de heroína. Otro signo del consumo de heroína es el estreñimiento que a menudo sufren los adictos a opiáceos. El consumidor habitual de esta droga puede buscar laxantes. Pueden experimentar infecciones de la piel, o de otro tipo, y una inmunidad baja a la enfermedad.

 

El dolor del consumidor será suprimido, lo cual no es sorprendente, ya que los opiáceos se usan para aliviar el dolor. En el lado trágico, sin embargo, esta el hecho de que los signos de consumo de la heroína pueden incluir el aborto espontáneo.

 


La adicción a a heroína es una trampa que puede requerir ayuda para escapar de ella

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Una de las muchas cosas tristes de la adicción a la heroína es que el mismo adicto rara vez es consciente del daño que esta haciendo a su vida. A menudo empiezan a descuidar sus propias necesidades, la adquisición de la dosis de heroína para el día es mucho mas importante. Puede que no coman adecuadamente y pueden tener una apariencia ojerosa, si el consumo de heroína es fuerte o prolongado.

 

Algunos adictos a la heroína pueden pedir ayuda, pero la mayoría temen al dolor y a los síntomas de abstinencia de la retirada. Muy a menudo son los familiares quienes tienen que rescatar al adicto a la heroína y ponerle en la retirada. Puede que solo por conocer los signos de consumo de heroína usted pueda detectar la adicción y comenzar a hacer los arreglos necesarios para la rehabilitación. Un adicto puede tratar de ocultar los síntomas de consumo de heroína, mediante usar ropa de manga larga para cubrir las marcas de las agujas. La familia debe negarse a aceptar las mentiras y simplemente ayudar a la persona a llegar al centro de rehabilitación.

 

Si esta es la situación en que se encuentra usted con un ser querido, pónganse en contacto con Narconon para obtener ayuda. El programa de rehabilitación de la heroína de Narconon tiene una tasa de éxito del 70 por ciento, uno de los mejores en el campo, y puede ayudar al adicto a volver a la vida y a la productividad de nuevo. Usted puede tener a esa persona de vuelta, otra vez como era antes de empezar a consumir drogas.

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El consumo de heroína está asociado con enfermedades infecciosas.

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Los consumidores de drogas de forma inyectada a menudo descuidan las acciones básicas que protegen su salud. Si comparten las agujas, corren el riesgo de compartir la hepatitis, el VIH u otras enfermedades. La inyección puede colapsar las venas, causar infección en el revestimiento del corazón o en las válvulas o crear abscesos. Si no se trata, la mayoría de estas condiciones pueden progresar y convertirse en enfermedades más graves que producen la muerte. Por ejemplo, infecciones locales que pueden aparecer como resultado de los adulterantes de la heroína de alquitrán negro de México, pueden convertirse en fascitis necrotizante, una infección que avanza rápidamente y que progresivamente destruye más y más tejido. La heroína de alquitrán negro puede ser adulterada con dextrosa, almidón de maíz quemado, café instantáneo, y, a veces con basura.


Los consumidores de drogas a menudo descuidan otros cuidados personales básicos también. Muchos no logran mantenerse limpios y arreglados e ignoran las enfermedades. Sus vidas diarias se consumen, en su mayoría, en asegurarse de tener suficiente cantidad de opiáceos para prevenir que aparezcan los síntomas de abstinencias de la droga. Cuanto más avanza en el camino hacia la adicción, más consume su atención este patrón de consumo de drogas y se rompe el patrón de su vida anterior sin drogas.

 

Ciertamente, la dieta de un adicto a la heroína está por lo general deficiente de forma severa en nutrientes, lo que pueden conducir a otros problemas.

Los graves síntomas de abstinencia impiden la recuperación

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La mayoría de los adictos a la heroína tienen un temor tan grande de los síntomas de abstinencia de la droga que entran en acción durante la retirada, que van a hacer casi cualquier cosa para evitar esta experiencia. Están seguros de que no pueden sobrevivir o disfrutar de algo en la vida si no están bajo los efectos de la heroína, por lo que se niegan a admitir el problema y se resisten a los esfuerzos que se hacen para ayudarlos.


Pero cada día, corren el riesgo de obtener una bolsa de heroína que se ha cortado menos de lo normal, lo cual puede resultar en una sobredosis que les envía al hospital o a la morgue.